Testimonios
Marta es la persona que te da las mejores herramientas necesarias para afrontar todo aquello a lo que tienes que enfrentarte para tu bienestar de la forma más amable, cercana, profesional y sobre todo vocacional. Por si no lo hubiera hecho lo suficiente aún, recomiendo muchísimo sus sesiones terapéuticas a todo tipo de personas con todo tipo de mentalidades.
A.
Hace un año que empecé la terapia con Marta. Sentía que algo en mí no estaba bien y que de alguna manera estaba ligado con cómo yo me relacionaba con los hombres y las relaciones que construía, en las que siempre terminaba sufriendo.
Después de este tiempo puedo decir que empezar con Marta fue de las mejores decisiones de mi vida. Poco a poco hemos podido indagar en mi, ayudándome a hacer conscientes partes de mi misma que ni yo sabía que podían estar afectándome tanto en mis relaciones y en mi día a día. Ahora siento que soy una nueva y mejorada versión de mi, he aprendido a construir relaciones de forma sana, a marcar límites y, sobre todo, a entenderme en distintas situaciones. A día de hoy puedo decir que me siento fuerte y capaz de gestionar lo que me depare la vida.
Estoy muy agradecida a Marta por acompañarme en este proceso, aportarme la luz que necesitaba cuando estaba perdida y ayudarme a florecer.
M.
Personalmente, recomendaría a Marta a toda persona que necesite o esté buscando una psicóloga para empezar la terapia. En un primer momento no sabia donde buscar una de confianza pero vi varias opiniones sobre ella y varias personas me recomendaron ir con ella y la verdad que genial desde el primer momento. Es super fácil con ella; lo hace todo super fácil y super llevadero y te da el espacio y la facilidad de llevar la terapia y las sesiones a tu ritmo y con lo que más necesites en esa sesión. De 10!
A.
Hacía años que sentía que tenía que ir a terapia pero nunca llegaba a dar el paso, fue pasando el tiempo hasta que me planteé seriamente el buscar un/a psicólogo/a. Fue muy fácil porque una clienta me recomendó a Marta y no busqué mucho más. Me decían y leía que no siempre el primer profesional era con el que terminabas toda la terapia, si no que incluso podrías pasar por varios. Este no fue mi caso ya que en la primera consulta con Marta me sentí cómoda y que fluía... Me gusta su manera de decir las cosas o mostrarte ciertos aspectos de ti, lo hace desde la cautela y mientras "no te conoce", desde la hipótesis. Ya llevo unos meses yendo a terapia y puedo decir que estoy contenta, como me dijo Marta al principio es un camino largo pero poco a poco con el paso del tiempo, todo el esfuerzo y constancia se ve reflejado.
C.
Marta es maravillosa, como persona y como profesional. Reúne todas aquellas cualidades que un psicólogo necesita para crear un vínculo terapéutico y, sobre todo, para ayudar a aquellos que se presentan delante de ella. Marta no sólo sabe guiarte y darte las pautas para que avances, sino que lo hace con transparencia, empatía, sensibilidad, honestidad, paciencia y con el rigor que toda terapia conlleva. Desde que la conozco mi calidad de vida ha aumentado y sé que gran parte es gracias a ella y al trabajo que hemos hecho juntas en terapia. De corazón siento que aquellos que pasamos por su consulta somos unos afortunados.
A.
Lo más importante (desde mi punto de vista) en una terapia es sentirse en un ambiente cómodo y familiar donde seas capaz de soltarte y expresarte tal y como eres. Desde el día uno que estuve con Marta me he sentido como en mi casa (incluso mejor) en un entorno donde se me escucha y se me aconseja desde la comprensión y nunca desde el juicio. Aconsejaría a todo el mundo que cuidase su salud mental con profesionales como Marta.
D.
Tras una experiencia mala en terapia, había decidido que probaría con otra psicóloga, iniciar una nueva etapa. En la anterior experiencia no me sentía segura ni cómoda, no tenía conexión.
Buscando otra oportunidad, encontré a Marta y con ella no ha sido así, me he sentido segura, escuchada y valorada en todo momento. Me he abierto y he tratado temas, trabajado, he aprendido e incorporado herramientas que me faltaban y que nadie me podía dar, ni mis amigos, ni mi familia.
Me ayudó a gestionar mis emociones, a liberarme de esa culpa, a encontrarle solución o al menos una hipótesis a todas esas preguntas, a entenderme mejor, a sentir que tengo posibilidades de seguir mejorando, de crecer. Con ella aprendo a darle la importancia que merece a cada cosa y a quitarle peso a esos pensamientos negativos.
Ojalá nos dieran más herramientas y tuviéramos más conocimientos de como gestionarnos a nivel psicológico, pero profesionales como Marta hacen que veamos un poco la luz, en momentos tan duros como épocas de baja autoestima, ansiedad, cambios, bloqueos…
Desde aquí, muchas gracias Marta.
N.
Tan solo tengo palabras de agradecimiento porque en el peor momento de mi vida puedo contar con una profesional como Marta, que me está ayudando muchísimo y hace que me enfrente a mis miedos, proporcionándome herramientas para afrontar y saber manejar los malos momentos. He recibido terapia con ella tanto presencial como on-line y puedo decir que en ambas he podido trabajar los mismos aspectos de una forma cercana, porque lo importante es el clima de confianza que se crea gracias a la cercanía y empatía de Marta, aunque físicamente estemos a unos pocos centímetros o a cientos de kilómetros de distancia; te hace sentir que no estás sólo, te escucha, te aporta paz mental, te da tu espacio para que te puedas expresar libremente y te hace ver mas allá.
Empecé mis sesiones hace más de 3 años con visitas bisemanales, pasando posteriormente a semanales y ahora bimensual, adecuando el tratamiento a mis circunstancias y evolución en todo momento. Ir a terapia es algo que todo el mundo debe de experimentar y si estás en las mejores manos, qué mas se puede pedir!
D.
De pequeña había intentado ir a varios psicólogos pero no llegué a encontrar al profesional que sintiese que me entendía o con quien encajase. Con Marta me he sentido muy a gusto desde el primer momento. Desde que empezamos terapia he notado una enorme evolución y Marta es la gran profesional que me encanta haberme encontrado en mi camino.
A.
Empecé terapia con Marta hace tres años para poder atravesar una situación estresante puntual en mi vida de la mejor manera posible, me ayudo tanto que, a día de hoy, después de algún parón, sigo con ella. Marta te ayuda a conocerte mejor, te guía con su discurso y te muestra las herramientas para saber gestionar esos rasgos de la personalidad de cada uno que dificultan desenvolvernos en determinadas situaciones o nos producen malestar. Para mi hacer terapia con ella no se trata de conseguir un fin en sí mismo si no de hacer un camino de bienestar acompañada por una inteligente, profesional y muy buena persona. Gracias a ella puedo decir que mi salud mental y emocional ha mejorado mucho y le estoy muy agradecida.
M.
Tras más de un año en terapia contigo (tratando una recaída en la bulimia, ansiedad, el comienzo y el fin con antidepresivos…), sé que sin ti, Marta, el proceso de recuperación en el que estoy no hubiera llegado, sin duda has sido mi salvación.”
A.
Llevo un año en terapia con Marta y por mi experiencia, la recomiendo indudablemente. Tomar la decisión de ponerse en manos de un profesional no es fácil, y más sabiendo que lo más probable es que sea un camino muy largo y en ocasiones duro. Por experiencias anteriores tenía miedo de no dar con el psicólogo adecuado, pero con Marta no podía ir mejor. Es la mejor acompañante en mi proceso de terapia. Te escucha y te valida sin que te sientas juzgado, que para mí es de lo más importante para sentirte cómodo con tu psicólogo. Si tengo que recomendar a un profesional para que la gente se ponga en sus manos, sin duda sería Marta.
I.
Estar en terapia con Marta es sentirse en un lugar seguro donde ella te escucha, te comprende y no te juzga. Marta me ayuda a ver todo lo bueno que hay en mí y también, desde el más profundo respeto y cariño, a entenderme, cuidarme y mejorar en todos aquellos aspectos que quiero cambiar. Es seguir un camino con una guía que, con mimo y cariño, te va mostrando la luz al final del túnel. Empezar terapia con Marta es una de las mejores decisiones que he tomado porque, además de ser una gran profesional, es una gran persona.
E.
La verdad que no encuentro las palabras para describir lo bien que me siento después de haber iniciado las sesiones con Marta, pero si puedo decir que lo que antes era un mundo cuesta arriba con piedras cayéndose encima, ahora es llano y con piedras que las puedes saltar e incluso bordear sin apenas esfuerzo.
Antes ni sabía que la salud mental existía, ahora me doy cuenta de lo importantísimo que es.
M.
He encontrado con Marta mi verdadera tabla de salvación.
Nunca me he sentido juzgada por ser yo misma durante nuestras sesiones. De hecho, es el único lugar en el que me siento YO, libre. Ir a sus citas es algo que no me supone un trabajo, todo lo contrario, siempre estoy deseando que llegue el día...aún cuando sé que se van a tratar temas muy duros para mí.
La mejor inversión de mi vida, y es que la calidez y cercanía de Marta no tienen precio...Sé que me queda mucho trabajo por delante, pero mi vida ya es mucho mejor gracias a ella. Para mí, LA MEJOR!!"
M.
Cuando tu vida siempre ha sido un poco caos por tu hiperactividad desde pequeña asociada a déficit de atención no es fácil gestionar muchas cosas, yo recurrí a Marta después de una ruptura un poco traumática y la perdida de mi abuela, no sabía cómo gestionar todo eso y me habló una de mis mejores amigas de ella y decidí que mi salud mental estaba por encima de cualquier cosa. Bendito día el que la encontré, consigue que entienda el porqué de muchos de mis actos, conseguimos que mi ansiedad mejorara perdiéndole el miedo, en esto aún nos queda mucho camino, no es fácil, pero nada en esta vida lo es, pero creo que todos deberíamos de invertir más en nuestra salud mental y la sociedad sería mejor, nuestra vida y relaciones con los demás serían mejores. Yo solo tengo palabras de agradecimiento hacia ella por ayudarme y acompañarme, por luchar conmigo y hacerme ver de lo que soy capaz. Gracias Marta, de corazón.
M.
Tuve la suerte de encontrarme con Marta en uno de los momentos más bajos de ánimo que recuerdo. Normalmente lleva tiempo coger confianza con un/una profesional pero me sentí en un espacio seguro desde las primeras sesiones y noté el click tan difícil de encontrar a veces.
De Marta destacaría sin duda su profesionalidad y humanidad. Es alguien con quien puedes no solo tratar tus problemas y que te ayude con ellos sino que también puedes hablar de lo que te inquieta de las sesiones, de la incertidumbre que puede causar un proceso que a veces resulta tan largo. Destaco esto porque en mi búsqueda de ayuda profesional nunca he sentido esa sensación de equipo y de poder hablar libremente de las dudas sin sentir que dudo de la profesionalidad de alguien. Siento desde hace tiempo que de algún modo formamos un equipo porque así me lo hace sentir. Realmente te acompaña en tu proceso y eso, en mi experiencia, no es fácil de encontrar.
M.
Empecé mi proceso terapéutico con Marta en el año 2019. Llegué a su consulta sin saber muy bien por qué y para qué, cuando mi vida era un auténtico caos emocional a todos los niveles (familiar, sentimental y profesional). Y trabajamos mucho juntas para ponerle nombre a lo que había que ponerle nombre. Marta es una gran profesional; empática, con vocación por su profesión, dulce y muy seria en su trabajo. Con Marta sientes que eres una prioridad y te hace sentir como si fueras su única paciente y la más importante. (Aunque no sea así, porque me consta que tiene una larga lista de espera, y no me extraña). Si me preguntan si la recomendaría, respondería: SÍ, Te va a cambiar la vida, a mí me la salvó.
J.
Llegué atraída por su forma de divulgar en una red social, Instagram, y es que parecía que lo que yo estaba leyendo me lo estaba contando o explicando alguien que me quería ayudar de verdad ya que lo exponía de una forma directa, fácil y realmente cercana.
Así es como después de pasar por dos psicólogas y no encontrarme, por diferentes motivos, bien en las sesiones, me decidí a contactar con Marta. Ella me respondió que tenía lista de espera y que, muy sinceramente, quizás sería importante para mí no esperar a que ella me atendiera y buscar otro profesional…esa sinceridad de que prevaleciera antes mi bienestar y no su “cartera” de clientes hizo que me decidiera a esperarla...
Marta, me ha enseñado a conocerme a mí misma. A conocer a la persona que realmente habita en mí, la que siempre ha estado ahí y no me han dejado o no la he dejado conocerme, aceptarme y validarme…es muy curioso como a veces llevas a la sesión un tema en concreto, que luego resulta que se desencadenan otros que aparentemente no tienen relación, pero sí que la tienen y que hace que acabes haciendo ese “click” que necesitabas desbloquear y que no sabías ni que existía en tí.
Sinceramente, es muy gratificante sentir tanto, incluso a través de la pantalla del ordenador porque, aunque se pueda pensar que las veces que solo podemos hacerlo de forma telemática, resulte insuficiente, ella sabe cómo acompañarte en todo momento y se crea una burbuja especial donde sentirte validada, escuchada, acompañada, etc…
Marta tiene una sonrisa que enamora y eso traspasa pantallas!
Gracias por querer dedicarte a la psicología y gracias por acompañarme en mi proceso terapéutico.
J.
Marta es la segunda psicóloga a la que acudo en busca de entenderme un poco mejor y encontrar herramientas que me ayuden en mi día a día, entre otras cosas. A pesar de lo que puede costar conectar con cualquier persona, y en este caso con un/a profesional que es totalmente ajeno/a a tu vida, Marta me hizo sentir completamente segura, comprendida y vinculada a lo que creamos desde la primera sesión. En este año que llevamos trabajando juntas en mis heridas, puedo decir con conocimiento de causa que tiene unas capacidades que van más allá de la psicología, que no se estudian sino que van ligadas a su persona, lo que le hace ser tan increíble en su trabajo. Me siento afortunada de tener a una profesional como ella acompañándome en este proceso y espero que mucha gente más tenga la misma suerte.
P.d.: Y a ti Marta, darte las gracias una vez más por ayudarme tanto a quererme y aceptarme cada día un poquito más.
S.